Cómo tomar la tensión arterial en casa
Controlar la hipertensión y llevar un tratamiento reducen los riesgos de problemas cardíacos, renales o cerebrales.
Una tensión arterial alta avisa de la existencia de unas arterias rígidas que no se expanden bien, lo que se asocia con un mayor riesgo cardiovascular. Cada vez es más habitual que quienes tienen hipertensión se controlen la tensión en casa.
Tensión arterial
Según explica el doctor Juan Antonio Divisón, miembro de la Sociedad Española de Hipertensión y profesor de la Universidad Católica San Antonio de Murcia, la medición de la tensión en casa es una herramienta para conocer el buen y mal control de la hipertensión y si además otros familiares lo emplean se puede detectar.
«Los hipertensos en tratamiento que se toman la tensión en casa pueden compartir con su médico esta información para tomar las decisiones más adecuadas sobre su enfermedad».
Entre las ventajas de tomar en casa la tensión está que se evita la reacción de alerta o fenómeno de la bata blanca que se produce en entre un 20% y 30% de los pacientes.
Aunque existen algunos dispositivos de muñeca, hay que tener en cuenta que un cambio en la altura de la mano puede modificar las mediciones y se aconseja el uso de los de que miden la presión en el brazo, son más fiables.
Se estima que un 50% de los hipertensos tiene mal controlada la tensión y que entre un 20% y un 25% de quienes tienen la enfermedad lo desconocen. A partir de los 40-45 años hay que acudir a consulta para tomar la tensión de vez en cuando».
Una medición fiable
Para que la medida de la presión arterial en casa sea fiable la Sociedad Española de Hipertensión-Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA) desde su web recuerda que la persona debe hacerlo tres días a la semana, antes del desayuno y de la cena en dos ocasiones con un intervalo de un minuto entre ellas, en un ambiente tranquilo, con la temperatura adecuada y la vejiga vacía.
«Se debe adoptar una postura correcta, es decir, sentado, sin cruzar las piernas y con el brazo apoyado. Por otra parte, no debe de haber realizado ejercicio físico (como por ejemplo, subir las escaleras), y no haber fumado ni ingerido comida o alcohol al menos 30 minutos antes de la medida».
La toma de la presión sanguínea en casa podría ayudar a diagnosticar a los hipertensos que no saben que lo son. La hipertensión no da síntomas y sólo su control y tratamiento reducen los riesgos de problemas cardíacos, renales o cerebrales.
«Muchas de estas personas son jóvenes y personas de mediana edad que ‘como se encuentran bien’, no suelen acudir a las consultas médicas, pero sí se tomarían la presión arterial si hubiera en casa un tensiómetro, normalmente utilizado por otro miembro de la familia».
Fuente: Madrid España, 30 octubre 2015, Diario Información, http://www.diarioinformacion.com.